Balbín dijo en un homenaje a Honorio Pueyrredon “Venimos a este lugar a encontrarnos
con nuestros muertos; con nuestros magníficos muertos, no porque ellos lo necesiten, no porque ellos precisen de nuestros homenajes... venimos aquí porque nosotros los necesitamos. Somos nosotros los que sentimos la imperiosa necesidad de acercarnos a ellos para que nos muestren el derrotero a seguir.
Demasiados proceres dio la UCR a esta Republica, demasiadas conductas radicales a seguir por quienes abrazamos esta causa.
En estos dias deben venir a nuestra mente, la imagen de Balbín preso en Olmos, la de Raul contestandole a Reagan en los jardines de la casa Blanca, la de Illia saliendo por ultima vez de la Casa Rosada, la de Karakachoff, la de Amaya o la del juicio a las Juntas.
Es que el radicalismo es Elpidio González correteando anilinas, Sabattini atendiendo en Villa María de boina negra o guardapolvo raído, es la hazaña de abril del '31, o las patriadas de Pomar, Cattaneo y tantos otros.
El radicalismo es guardapolvo blanco, YPF, y una Universidad abierta al pueblo.
El radicalismo es esa casa feúcha y mal pintada con los colores partidarios, con sus libros, sus cuadros, su bandera del Parque, su remedio para los viejos, las clases para los pibes. Son la ficha, los amigos, el puntero, los fiscales y los coches para el día de la interna. Solo quienes sientan estas imágenes como patrimonio propio, cumplen años en estos dias.
Moisés Lebensohn afirmaba que el radicalismo no es una etiqueta que se coloca sobre un hombre como sobre un frasco en una droguería. Es un contenido. Quien no alienta pasión de justicia y a su influjo gobierna su vida, no es radical por más que así se titule y por alta que sea su ubicación en el escalafón partidario, es una forma de conducta y un estilo de vida.
Frente a la corrupción, la soberbia del poder y el autoritarismo, el radicalismo debe emprender una lucha franca y permanente, sin atajos, sin rápidas alquimias ni soluciones taquilleras, puede resultar una penosa y larga lucha contra una sociedad que nos de la espalda por momentos, pero es conducta radical.
Feliz cumple y a recordar Radicales que según nuestro Fundador hay una obra a consumar. Que así sea.
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